REFLEXIÓN

Hoy toca reflexión:
Me hago mayor  vieja; no sé si estoy viviendo la crisis de los 40 con un par de años de retraso, o la de los 50 anticipadamente.
Las arrugas no me preocupan en absoluto. Son huellas que me ha dejado la vida de recuerdo y no tengo interés ninguno en borrarlas de mi rostro.
La realidad es que el tiempo no se detiene aunque te compres un deportivo, te pongas botox, o unas tetas de plástico.
Me da vértigo darme cuenta que ese futuro que planeas durante toda tu vida, ya es hoy.
Que hay sueños a los que tienes que renunciar porque el tiempo ya no te da para hacerlos realidad. Que me queda por hacer menos de lo que ya he hecho.
¿Y ahora qué?
Barajo dos opciones: una es comprarme unas converse y un vaquero roto, un Louis Vuitton en los chinos y salir a hacer la compra disfrazada de veinteañera; y la otra es respirar hondo, abrir mucho los ojos para no perder detalle de lo que me queda por vivir; que espero sea por lo menos el doble de lo que he vivido. Saber quien soy y limitarme a seguir siéndolo a pesar de la flacidez de mis muchas curvas.
...sigo pensando, quizá me ayude a decidir, el resultado de las próximas pruebas médicas.